Maestro y discípulo: Cómo Castro influyó en la estrategia de poder de Chávez

Conocí al general Raúl Isaías Baduel en el año 2014 en la cárcel de Ramo Verde, compartíamos esporádicamente en misa cuando se nos permitía, cruzando algunas palabras bajo la estricta vigilancia de nuestros carceleros, sin embargo en el 2015 ya estando en libertad ambos, pude visitarlo en su modesta vivienda en Maracay; fue allí que encerrado en su diminuta oficina por más de 5 horas pude conocer “su verdadera” historia. Durante 5 horas sin intervalos, relató el recorrido de su vida militar dentro las FFAA, entre anécdotas ideológicas de su lealtad, NO hacia su “compadre y amigo” Hugo Chávez, sino al proyecto patriota romántico que Chávez pregonaba a favor de los más necesitados y en contra de los explotadores de siempre: “empresarios deshonestos y politiqueros corruptos de turno”.

Hoy puedo entender perfectamente las 5 reglas fundamentales que Fidel le exigió a Chávez, para aplicarlas sistemáticamente a corto plazo con el propósito de perpetuarse en el poder, reglas que me explico en detalles el General Baduel, y que el mismo escuchó en cuerpo presente en una de las muchas reuniones que se le permitió asistir antes de convertirse en el gran enemigo de Fidel y de Chávez.

Puntos importantes que Fidel consideraba necesarios para que Chávez, se perpetuara en el poder:

Corrompe las fuerzas públicas para que las controles, ellos tienen las armas, un pueblo sin armas no tumba tiranos.
Crea un conflicto periódicamente, victimízate, échale la culpa de todo lo malo a la oposición, tus seguidores te creerán ciegamente a ti, una mentira repetida 100 veces se convierte en una verdad irrefutable.
Destruye a la clase media, son un mal ejemplo para los pobres.
No saques de la miseria a los pobres, si lo haces no votarán más por ti.
La mejor forma de eliminar físicamente a tus enemigos y a tus amigos que ya no son útiles para la revolución, es que parezca un suicidio, una duda no es un hecho, los hechos inculpan las dudas no, siempre y cuando controles todos los poderes del Estado.

Según Baduel su desgracia comenzó cuando se opuso, sin embargo no pudo evitar que colocarán en las entradas de los cuarteles el nefasto eslogan: «PATRIA, SOCIALISMO O MUERTE«.

Tuve la invaluable oportunidad de conocer con sus palabras en cuerpo presente, la historia que jamás será contada por los narcos genocidas, fue un recorrido extenso de detalles asombrosos entre acciones y reuniones privadas con Hugo Chávez y Fidel Castro, hasta los motivos explícitos que lo llevó a rescatar a su compadre en La Orchila esos fatídicos días 11,12 y 13 de Abril de 2002.

La anécdota que más me llamó la atención fue cuando Baduel me contó que un edecán de extrema confianza de Chávez, pero al mismo tiempo pupilo suyo le dijo:

“Mi general, ¡Fidel a usted lo quiere MUERTO!, yo mismo lo escuche, le dijo a mi comandante (Chávez) que usted representa una amenaza inminente para la revolución, mi comandante respondió (Chávez): Fidel, el es mi compadre y amigo, pero la revolución está primero, muerto no, pero si preso”.

Esta fue la historia que me contó el General Isaías Baduel, “su verdad”, yo en lo personal saqué mis propias conclusiones, saquen ustedes las suyas.